
Problemas familiares generadores de conductas disruptivas en alumnos
Como docente de la Escuela Normal Superior de Querétaro, estoy plenamente convencido que los profesores frente a grupo, administrativos y directivos deben de trabajar junto con la familia y en la misma dirección, si se quiere un desarrollo integral y un óptimo aprendizaje de los educandos.
De igual forma , estoy consciente que ustedes al egresar de nuestra Escuela Normal Superior, tendrán que enfrentarse no solo a la labor de enseñanza frente a grupos numerosos, a problemas con los padres de familia, a problemas burocráticos, y muchas veces a carga excesiva de trabajo, y ni que decir de los problemas de aprendizaje de sus alumnos, que son desgraciadamente cada vez más frecuente, ya que muchos de estos problemas de aprendizaje o de conducta no implican necesariamente problemas biológicos, sino que tienen su origen en carencias familiares, o son derivados de la cultura imperante en la familia o su entorno social-cultural.
Problemas que repercuten negativamente en el proceso de enseñanza y en el desarrollo integral de nuestros alumnos.
En la actualidad, como hemos visto en las lecturas anteriores, se habla mucho de que el origen origen de las conductas disruptivas de nuestros alumnos está asociado, no solo al ambiente sino principalmente con la familia y el tipo de familia en que nuestro alumno se desarrolló y se sigue desarrollando. Esto es porque la familia juega un papel preponderante en el estado emocional como lo veremos en el cuadro No. 1 titulado , “Influencia de la familia en el desarrollo de pautas inadecuadas de conducta” . En este comparativo podremos ver qué forma y qué problemas familiares provocan.


Los estudios de Grych y Fincham (1993) y Harold y Conger (1997), indican que a mayor percepción de hostilidad entre los padres, los hijos tienen más probabilidad de expresar síntomas depresivos o ansiosos y el estudio hecho por Davies y Lindsay (2004) indica una relación significativa entre los conflictos padres/madres y los problemas de conducta internos en adolescentes, como los de ansiedad y de depresión que implican sentimientos de soledad, temor, inferioridad, culpa, tristeza, desconfianza, angustia que afectan a sí mismo, y problemas de conducta externas que afectan a otros, tales como el incumplimiento de normas que incluye conductas vandálicas como robar, escaparse de casa, meterse en problemas, hacer trampa, mentir, ausencia de sentimientos de culpa y rechazo de la autoridad y de normas sociales, la agresión entendida como ejercer conducta antisocial, discutir con vehemencia, exigir mucha atención, agredir, chillar, amenazar, fastidiar, ser irritable, envidioso, desobediente y tirano, etc.